“Apple está comprometida con los más altos estándares de responsabilidad social y medioambiental y conducta ética. Se espera que los proveedores de Apple proporcionen condiciones de trabajo seguras, traten a los trabajadores con dignidad y respeto, actúen de forma justa y ética y utilicen prácticas ecológicas dondequiera que creen productos o realicen servicios para Apple”. Con estas palabras empieza el código de conducta elaborado para los proveedores de Apple, quienes tienen el deber de respetar las reglas establecidas con el fin de colaborar con el gigante estadounidense. Pero según lo que parece, una empresa taiwanesa no habría respetado los acuerdos tomados. Poco después del lanzamiento de los nuevos modelos de iPhone 12, la empresa americana tiene que hacer frente a un problema desagradable.
Después de varias investigaciones, la empresa de Tim Cook descubrió que uno de sus principales proveedores, Pegatron, no ha cumplido con el código de conducta. Pegatron es una empresa taiwanesa que trabaja para ensamblar los dispositivos Apple, el código de trabajo ha sido violado voluntariamente tanto en Shanghai como en Kunshan.
Gracias a las investigaciones y controles realizados, el gigante estadounidense arrojó luz sobre la empresa taiwanesa descubriendo que los ejecutivos han falsificado los documentos para permitir a los estudiantes de trabajar como empleados normales, de trabajar mucho más de las horas permitidas y en algunos casos de trabajar por la noche, contra las reglas de Apple. De hecho, el código subraya que los proveedores tienen la obligación de proteger los derechos de todos los estudiantes trabajadores a través del mantenimiento adecuado de los registros.
Ya en 2010 la casa de Cupertino tuvo que afrontar el escándalo de la empresa proveedora de Foxconn, se produjeron numerosos suicidios entre empleados de la oficina de Longhuan a causa de las malas condiciones de trabajo. Después del incidente, Apple intensificó los controles en los lugares de trabajo.
Apple, al descubrir el problema con Pegatron, tomó medidas bloqueando cualquier nuevo contrato con la empresa y declarando que no habrá más colaboraciones hasta que la situación se vuelva a estabilizar. De hecho, según lo determinado por el proceso correctivo, si los proveedores violan las reglas o presentan deficiencias tienen que enfrentar a un proceso para la corrección oportuna de los problemas. El hecho ciertamente ha tenido efectos positivos en el competidor Luxshare Precision Industry, que en 2021 tiene buenas posibilidades de convertirse en una nueva empresa de ensamblaje de iPhone. Por supuesto, la difusión de esta noticia también tuvo un impacto en los mercados, las acciones de Pegatron cayeron un 2,1%, mientras que las acciones de Luxshare aumentaron un 1%.
Ahora se espera que las medidas tomadas tengan un impacto positivo en las condiciones de trabajo de todos los empleados que, como afirma la empresa estadounidense, «merecen un lugar de trabajo justo y ético», y de los proveedores que deben cumplir con «los estándares más elevados relativos a derechos laborales».